A mí nunca me había pasado antes, ahora que tuve que dejar ir a mi niño Dovah me encuentro a cada momento que estoy solo ahogado por mis pensamientos y la angustia, lo echo de menos a cada rato.
Ahora entiendo mejor lo que es vivir con el pecho apretado a cada momento, no es agradable.
A mí nunca me había pasado antes, ahora que tuve que dejar ir a mi niño Dovah me encuentro a cada momento que estoy solo ahogado por mis pensamientos y la angustia, lo echo de menos a cada rato.
Ahora entiendo mejor lo que es vivir con el pecho apretado a cada momento, no es agradable.